El problema está en las deudas pendientes. En el qué habría pasado. En el "mejor arrepentirse de haber hecho algo que de no haberlo hecho". En el extrañar sin conocer y en el buscar sin saber.
El problema está en los otoños que pasaron y en la primavera que nos pisa los talones. Está en siempre cruzarnos y nunca encontrarnos. Peor, está en vernos y no llamarnos. El problema no es el orgullo, el problema es que pensamos demasiado.
El problema está en vos. El problema está en los dos. El problema es que ninguno de los dos se da cuenta.
La semana que vivimos en peligro
Hace 5 años
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